Alexiis, 30 de octubre, 2009
No hace falta que hagas la introducción, te lo digo yo, son las ocho menos diez y te estás resistiendo a conectarte para recibir un mensaje. Soy YESHUA.
Estás tan fuertemente impresionada por el mensaje mío como Sananda que acabas de leer de Cecilia, que incluso quisiste buscar en los distintos noticieros, tanto nacionales como internacionales, de la televisión a ver si encontrabas alguna confirmación pero por supuesto no encontraste nada.
Es lamentable que los medios de comunicación no se animen a divulgar las noticias que son de real importancia. Yo sé que en este momento te estás cuestionando absolutamente todo, estás cuestionándote si hacer una traducción que recibiste ayer de Mathew, estuviste traduciendo otro material que hablaba del Presidente Obama, de todo lo que se tenía programado y hoy recibes repentinamente esta noticia de que ha renunciado.
Sé que lo que están pasando los humanos es de suma dificultad, es muy difícil mantener el equilibrio, yo que he estado en el planeta, que he vivido la vida como humano, sé que este es un momento extremadamente duro para ustedes, para poder mantener el equilibrio y no abandonarse – casi diría – a la desesperación.
Principalmente ustedes, que son la vanguardia, en los últimos días han recibido tanto aliento de que las cosas iban bien y hoy repentinamente aparece esta noticia medio devastadora. No la voy a negar, pero les voy a presentar otra visión del panorama total.
Sí, aunque en el momento el Presidente Obama haya tenido que dar un paso al costado, eso no significa en absoluto que deje de ser la figura esperada que es y que ese cambio de dirección que se tuvo que dar en el día de hoy, no pueda ser por ahí solucionada mañana. Yo hablo de mañana porque es un término conocido y aceptado por ustedes, esto no quiere decir el mañana de lo que serían veinticuatro horas. Lamentablemente de nuevo todo se está demorando.
Es muy difícil darles aliento, necesitan recurrir a todo lo que en su interior saben que es la verdad, a toda la esperanza, a toda la fortaleza para mantenerse firmes. Es innegable que la luz logra su cometido, aunque se produzcan retrocesos.
Ya sé, ustedes me dirán que ha habido muchos, muchos retrocesos y esa es la parte dura para aceptar para ustedes.
Yo como Yeshua, el ser que ha caminado en la Tierra y como el que va a volver a pisar la Madre Tierra, les pido encarecidamente a todos los Trabajadores de la Luz, no se abandonen a la desesperación ahora pero es cierto, nuevamente hay una demora, nuevamente hay un retroceso, pero cada retroceso es un paso hacia un avance mayor.
Sé que para ustedes es tan difícil en la vida dura que están viviendo actualmente en el planeta el que se pospongan las cosas una y otra y otra vez. No queda otra porque todavía seguimos respetando el libre albedrío de la humanidad y lamentablemente, acá hay que decir que hay una gran, gran parte de la humanidad que no está consciente de lo que está pasando. Casi se diría que ya casi no tenemos medios para sacudirlos, tenemos que recurrir a cosas extremas para que despierten.
Necesitamos que esa parte de la humanidad despierte porque necesitamos que colaboren, que todos trabajen en conjunto, que todos, como una unidad, sigan adelante, sigan hacia la luz. No es posible elevar a la Madre Tierra contando solamente con los trabajadores de la luz y que el resto de la humanidad esté panchamente descansando.
Ustedes no se pueden imaginar cuán difícil es para nosotros transmitir un mensaje así, cuán difícil es que de un día a otro tengamos que desbaratar las esperanzas de que a lo mejor en horas se pueda finalmente producir el vuelco anhelado.
Lamentablemente gran parte de eso se debe a la humanidad dormida que no quiere despertar, pero tampoco vamos a proceder a sacar a esa cantidad de humanidad del planeta y traspasarlos a otro lado. No puede ser, porque es muy grande todavía esa parte, es muy grande.
Todos nosotros, como ustedes nos llaman, los maestros, los seres angelicales, estamos esperando y orando para que finalmente se produzca el Gran Cambio. Nuestra tristeza es completamente comparable con la de ustedes, aunque ustedes – como se diría – lo están sufriendo en carne propia. Nosotros sufrimos junto con ustedes, pueden creerlo.
Les mando este mensaje para darles nuevamente un poco de ánimo, un poco de valor para que sigan adelante. No decaigan, la Madre Tierra no ha sido abandonada por nosotros, seguimos con todos nuestros esfuerzos, con toda nuestra capacidad para sacarla a flote.
Este es el breve mensaje. Sé Alexiis que prácticamente no tienes ganas, pero es necesario. Tú y todos los otros trabajadores de la luz tienen que seguir firmes, contamos con ustedes, porque si ustedes ahora nos flaquean, ¿entonces qué queda? Ánimo a todos, les mando todo mi amor y toda mi luz, Yo Soy YESHUA.
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